(DSC 0555 02-03-2013)
«La teorización de
la innovación como producto del aprendizaje y del conocimiento en acción no está
en absoluto consolidada ni constituye un cuerpo teórico uniforme. En un
extremo, los textos de teoría de la ciencia sensibles al <rodillo de la práctica>, en la expresión de Pickering
(1995), del que surgen las innovaciones, se mantienen reacios a aislar las
particularidades de la innovación, en su interés por las relaciones entre la mente,
el cuerpo y las emociones, la agencia humana y no humana y las combinaciones
recursivas e improvisadas de un proceso de descubrimiento que es siempre
contingente y abierto…» Â
«¿Por qué y para qué especular tanto expresando las cosas de forma harto
confusa e impostada?
Digámoslo sin miedo: no son más que extraños, seres invisibles y difusos
a los que ignoramos, a los que ni siquiera vemos, seres confinados en la
categoría más miserable, la de la invisibilidad y la ignorancia, para la que
legislamos pensando en la exclusión, en la expulsión, para la que ni siquiera
reservamos el destino terapéutico de las ratas.»